La artesanía textil fue una de las industrias más prosperas en la época andalusí en Granada, prueba de ello es la existencia de más de 5.000 telares solamente en la ciudad, otros cientos estaban repartidos por las diferentes localidades de la actual provincia de Granada. La Alpujarra se convirtió en uno de los centros neurálgicos de esta incipiente industria, convirtiéndose en uno de los principales productores de seda de toda la península. Las técnicas ancestrales aprendidas durante esta época siguen a día de hoy siendo empleadas para la elaboración de todo tipo de productos textiles.
Tradición artesana
Son muchos los pueblos de la Alpujarra que siguen empleando técnicas milenarias para la elaboración de artículos textiles. Esta tradición parece incorporada en el ADN de las gentes que allí residen, su fama trasciende las fronteras y sus diseños únicos están repartidos en numerosos países.
Pueblos como Pampaneira, Valor, Lanjarón o Capileria siguen manteniendo viva esta tradición milenaria, pero mención a parte merece la pequeña localidad de Bubión, con escasos 300 habitantes es uno de los centros de artesanía más famosos y reconocidos de toda la Alpujarra Granadina. En este pueblo se encuentra el taller de artesanía Jarapas Hilacar, famoso por sus trabajos delicados y sus piezas únicas. La artesana encargada de este taller ha sido galardonada con múltiples premios y reconocimientos, entre los más importantes destaca el reconocimiento de su taller, por parte de la Junta de Andalucía, como lugar de interés turístico.
Son muchos y muy diversos los productos que aún se siguen elaborando empleando telares artesanales con cientos de años de antigüedad, tales como bolsos, cortinas o tapices, pero sin duda el producto estrella es la Alfombra Alpujarreña, seña de identidad de esta región situada en la falda de Sierra Nevada.
Orígenes de la Alfombra Alpujarreña
Los orígenes de la alfombra alpujarreña no están totalmente claros, sin embargo, existen pruebas palpables de la existencia de este tipo de tejidos desde el siglo XVII. No obstante, es cierto que esta tradición se remonta mucho más en el tiempo, hasta la época musulmana. La influencia árabe fue fundamental para desarrollar esta industria en esta zona de la provincia de Granada. Dicha influencia fue más allá de aprender simplemente la técnica de la elaboración de la alfombra, también se copiaron los motivos, colores, etc.
Otra prueba reveladora sobre el origen de esta forma de tejer la encontramos al observar las técnicas actuales de elaboración de este tipo de alfombras. El uso de la técnica denominada “Confite”, consistente en arrollar una hebra de lana sobre la urdimbre. Esta forma de trabajar también fue introducida en la península por los árabes.
Elaboración de la alfombra alpujarreña
El proceso de elaboración de una alfombra alpujarreña puede variar dependiendo del artesano que la trabaje. La técnica más utilizada se basa en el tejido llamado calada, el cual se caracteriza por tener una estructura elástica y flexible, compuesta por dos series de hilos (urdimbre y trama).
La urdimbre está compuesta por un grupo de hilos tendidos entre los rodillos y colocados en paralelo. Dichos hilos recorrerán todo el largo del tejido para después ser enlazados por la trama.Para obtener un dibujo en color se deberá hacer salir a la superficie del tejido la trama en los lugares determinados, siendo de esta manera necesarias tantas tramas de color como colores tiene el dibujo, ocultándose el resto de los colores o suprimiéndolos donde no son precisos.
¿Dónde encontrar el taller de Jarapas Hilacar?
El telar artesano Hilacar esta situado en pleno corazón de la Alpujarra Granadina, en la localidad de Bubión. La dirección es:
